Los estudiantes de Stepanaván visitan el Complejo Educativo

La Fundación Luys visitó el Complejo Educativo con un grupo de 29 personas. Conocíamos a la mayoría de los estudiantes por nuestros viajes a Stepanaván.
Vinieron a conocer la vida cotidiana del Complejo Educativo, nuestras actividades, así como nuestra cultura de aprendizaje y enseñanza.
Conociendo de antemano las preferencias del grupo, preparamos una agenda personalizada.
El primer día, el grupo de invitados interesados en las bellas artes fue a la Mezquita Azul, donde concluyeron las jornadas armenio-iraníes.
Los demás estudiantes se quedaron conmigo y con Irina Apoyán en la escuela principal y vivieron un día verdaderamente lleno de acontecimientos. Nuestros alumnos presentaron la escuela a los invitados, explicaron las actividades, cantamos con en el grupo “Zenith”, visitamos los laboratorios, el taller de cerámica y asistimos a la defensa de un proyecto de investigación.
Por la tarde, el grupo de Stepanaván, acompañado por Irina Apoyán y Anush Nersisyán, paseó, conversó y disfrutó de un té caliente.
El segundo día comenzó con una liturgia organizada en el marco del proyecto “Despedida”. Luego se llevaron a cabo sesiones educativas según las preferencias del grupo. Algunos participaron en la revisión literaria abierta Cada mes con un libro, mientras que otros asistieron a la clase abierta de inglés Puentes educativos con la escuela secundaria Yesayán de Estambul. Fue gratificante que los invitados también participaran activamente en las discusiones.
Por la tarde, nos dirigimos a los clubes deportivos. Fue una auténtica fiesta: los alumnos acompañantes también participaron en los entrenamientos. Los estudiantes jugaron al baloncesto y, al final, la competencia se resolvió con una clase de baile conjunta. Fue inspirador ver cómo nos enseñábamos unos a otros․
Los estudiantes también participaron en el Festival de Proyectos Technolab, donde conocieron diversas soluciones tecnológicas. El ambiente creativo trajo nuevas ideas a los estudiantes de Stepanaván.
Terminamos el día con un paseo por Ereván. Caminamos por las calles, conversando, compartiendo ideas y hablando de los beneficios de la educación y la creatividad en un entorno abierto.
Fueron tres días durante los cuales los jóvenes aprendieron no solo en un nuevo entorno, sino también unos de otros.
Estos tres días demostraron que la conexión entre escuelas y entre estudiantes es real. Y que dicha conexión se forma cuando uno es honesto, abierto y está dispuesto a compartir sus experiencias.